Seguro de superyates: Tamaño y valor

Veamos qué hay que tener en cuenta a la hora de elegir un seguro para yates de gran eslora, qué condiciones deben cumplir el armador, la empresa de gestión o el patrón, y cuáles son las dificultades para los corredores de seguros marítimos especializados a la hora de encontrar pólizas adecuadas para yates de gran eslora.

La mayoría de nosotros, cuando pensamos en el seguro de yates, no somos realmente conscientes de las diferencias significativas entre, por ejemplo, el seguro para un barco de 15 metros o para un superyate de 50 metros o más de eslora. La diferencia no está sólo en el tamaño de la embarcación, sino en su valor y en los daños que una embarcación tan grande puede sufrir o causar. En esta guía trataremos de informar a nuestros lectores sobre qué hay que tener en cuenta a la hora de elegir un seguro para grandes yates, qué condiciones debe cumplir el propietario de la embarcación, la empresa de gestión o el patrón (capitán) de la embarcación, y a qué dificultades se enfrentan los corredores de seguros marítimos especializados a la hora de crear pólizas de seguro adecuadas para grandes yates.

Algunas formas de categorizar los grandes yates consideran que un superyate es cualquier embarcación de más de 24 metros (80 pies), un megayate de más de 200 pies y un gigayate de más de 300 pies. Para nuestra guía, nos ceñiremos al término generalmente aceptado "superyate", definido como todo yate de más de 24 metros. Entre los riesgos que deben cubrirse con un seguro o los tipos de seguro que se necesitan, hay tres categorías principales: seguro del casco (Hull & Machinery insurance), seguro de P&I o afiliación a un club (P&I coverage or club membership), y seguro de la tripulación y seguro médico (crew insurance and medical insurance).

Dentro de estas categorías principales hay varias adiciones, cláusulas sobre ampliación o reducción de la cobertura, condiciones especiales, descripciones de los límites de la zona de navegación y condiciones que deben cumplirse. El seguro de Casco cubre todos los daños que se produzcan en la embarcación o el equipamiento, causados por influencia externa, como varada de la embarcación, incendio, caída de rayo, robo del equipamiento de la embarcación o robo de la embarcación. Aunque existen condiciones de seguro ofrecidas por varias aseguradoras que proporcionan coberturas muy amplias y de calidad, la práctica del mercado es contratar el seguro Casco para superyates basándose en las condiciones establecidas por el IYC (Institute Yacht Clauses).

Dicha cobertura suele ser más reducida que la ofrecida por algunas aseguradoras a través de sus contratos específicamente redactados, sin embargo el mercado, el prestigio y la práctica común difieren. El seguro de responsabilidad civil suele denominarse, en la jerga de los superyates, cobertura P&I. Este tipo de seguro fue concebido por los clubes de P&I (Protección e Indemnización) que ofrecían a sus miembros cantidades muy elevadas de protección e indemnización por daños causados a terceros. En este caso, el seguro se ofrecía según el principio de mutualidad. Esta afiliación al club es cara y arriesgada para el propietario, porque puede verse obligado a pagar posteriormente la cuota de un año en el que se hayan producido más daños de los que cobraba el socio.

A pesar de ello, los propietarios de superyates siguen buscando un seguro P&I, sin saber que en realidad deberían buscar un seguro TPL (responsabilidad civil frente a terceros) o un seguro de responsabilidad civil del propietario. Incluso las aseguradoras y los clubes se han adaptado a este mercado y ofrecen la cobertura P&I en lugar de la afiliación. En la mayoría de los casos, la cobertura P&I supera los 500.000.000 euros. La tercera categoría es el seguro de la tripulación, los pasajeros y los capitanes contra accidentes. Este segmento también ofrece muchas variaciones en lugar de un único tema.

Los propietarios de superyates suelen contratar un seguro especial para su tripulación, es decir, el capitán, varios oficiales, marineros y azafatas, en el que les proporcionan un seguro en caso de accidente, lesión, enfermedad, así como los gastos de regreso en caso de interrupción del viaje y, en algunos casos, el coste de la pérdida y el impago de los salarios en caso de lesión o enfermedad, que es muy similar al seguro clásico de la tripulación. A la hora de contratar un seguro para un superyate, hay que pensar en un gran número de pasos, comprobaciones y análisis para evaluar el riesgo en sí, es decir, qué es lo que tiene que ocurrir exactamente para que una embarcación esté asegurada.

Hasta hace algunos años, los yates se consideraban un "riesgo deseable", pero tras el huracán que azotó el Caribe en 2015, y el gran número y elevado importe de los daños pagados, la situación cambió drásticamente. Las fuertes pérdidas de las aseguradoras y los sindicatos les obligaron a aumentar los precios de las primas, y luego a ponerse más exigentes sobre qué embarcaciones quieren o no quieren asegurar. El mercado de seguros de Lloyd's sólo reconoce a unos pocos sindicatos y aseguradoras que ofrecen seguros para superyates, y son muy cautelosos, lo que complica enormemente todo el asunto. De todos es sabido que en el mercado de seguros de Lloyd's (que sigue siendo el más interesante para los propietarios de superyates), es más difícil encontrar un interesado en contratar un seguro para embarcaciones con un valor inferior a 10 millones de euros, ya que los límites inferiores están fijados en tres millones.

Todos los casos se examinan rigurosamente: la aseguradora necesita saber dónde se registró el barco, cuál es su puerto de escala, quién es el propietario. También se exige el currículum vitae del patrón, con toda su experiencia previa en ese tipo de embarcaciones o similares, sobre todo porque el número de yates en el mercado crece rápidamente. Aunque no se exige mucho para los superyates privados, todos los requisitos del MARPOL (Convenio Internacional para Prevenir la Contaminación por los Buques) y del Convenio sobre el Sistema Antiincrustante son mínimos.

Hay muchos convenios adicionales que deben cumplir los superyates destinados a uso comercial, que suelen fletarse. La póliza suele indicar el valor real de la embarcación en el momento de contratar el seguro, así como el valor incrementado. Teniendo en cuenta todo lo anterior, así como un gran número de pasos intermedios y comprobaciones adicionales, resulta obvia la importancia de contar con un corredor especializado y con experiencia a la hora de asegurar este tipo de embarcaciones.