Frane Cecić Acosta: El legado del capitán
El capitán del puerto deportivo Martinis Marchi transmitió los conocimientos de generaciones de navegantes a las nuevas generaciones y convirtió Maslinica en uno de los lugares más prestigiosos del Adriático.
No muchos de los que navegan en Croacia no han oído hablar del nombre de Frane Cecić Acosta. Pero pocos saben que Frane nació en Sudamérica y llegó a Šolta hace 50 años, donde comenzó su inquebrantable conexión con el mar. Pasó toda su vida en el ámbito náutico, como capitán, reparador, empresario y capitán de puerto deportivo, y está en el puerto deportivo Martinis Marchi de Maslinica desde sus inicios. Es un placer conocer a este auténtico lobo de mar.
¿CÓMO EMPEZÓ SU "VIDA" EN EL ÁMBITO NÁUTICO?
Di mis primeros pasos en este negocio en nuestro astillero familiar de Rogač, propiedad de mi difunto abuelo, donde también trabajaba mi padre. Allí aprendí lo que significa sacar y botar un barco, todo sobre los barcos de madera y los materiales. Mi abuelo también me enseñó mucho sobre madera, y mi padre me enseñó sobre materiales más nuevos, fibra de vidrio y epoxi.
¿LUEGO LLEGÓ EL PUERTO DEPORTIVO DE ZENTA?
En 1988 llegué al puerto deportivo de Zenta como guarda y reparador. En 1991 me convertí en capitán del puerto, y allí estuve hasta 1993. Entretanto participé en la guerra; durante ese periodo monté en lanchas rápidas, botes inflables hasta Šipan y Dubrovnik, rompiendo el bloqueo. En 1993 me adentré en aguas privadas con mi empresa Gringo Nautica, primero con yates. En aquella época, el yate medio tenía unos 20 metros de eslora; hoy tiene 50 metros. También empecé con el mantenimiento, las reparaciones, la pintura y las reparaciones por ósmosis, que era mi fuerte por aquel entonces. En 1993, empezamos a aplicar pinturas AWL Grip, un gran éxito en aquella época. También vendíamos barcos y gestionábamos una miniflota de alquiler de cinco unidades. Eso duró hasta 2006, cuando me convertí en capitán del puerto deportivo de Frapa.
¿HA ESTADO EN MASLINICA DESDE EL PRINCIPIO?
Soy el capitán desde la apertura del puerto deportivo Martinis Marchi en 2012, donde dirijo la parte operativa y la gestión. Mi trabajo consiste principalmente en la organización general. También tengo que supervisar todo lo relacionado con el personal, realizar entrevistas, contratar a gente, ceñirme al presupuesto acordado con el propietario y controlar la situación cada día. Otro aspecto del trabajo es la comunicación con los huéspedes, los socios comerciales, las agencias, los chárteres, los servicios, y estar presente en los salones náuticos. Los huéspedes aprecian especialmente cuando se les trata de forma personal, cuando sabes su nombre. Luego, cuando te ven cada año, ya sea en un salón náutico o en el puerto deportivo, te ven con otros ojos, se sienten como en casa. Realmente me alegra ver a algunos invitados que conozco incluso desde antes de dirigir mi propia empresa, y más tarde desde Frapa. Puedes ver cómo pasa el tiempo, cómo eras hace 20 ó 30 años y cómo eres ahora (risas).
¿CUÁL CONSIDERA SU MAYOR LOGRO EN UNA CARRERA TAN RICA?
Siempre me alegra transmitir los conocimientos acumulados durante tantos años: esa tradición y algo que hemos conseguido resumir de todas esas actividades a lo largo de tantos años, y que podemos transmitir esos conocimientos a las generaciones más jóvenes. Por ejemplo, un alumno viene a verme y se hace marinero, luego en unos años se convierte en patrón de un barco más pequeño. Y luego empieza a navegar por el mundo, se convierte en capitán. Para mí es un verdadero placer, y cuando vienen a saludarme, recuerdo quiénes eran y cómo empezaron. Lo mismo ocurre con la gente de recepción: cambian de trabajo, se convierten en gerentes, etcétera. Conozco a algunas chicas que han llegado a ser gerentes en otras empresas.
¿ES SU EVENTO DE VERANO EL ORGULLO DE MARTINIS MARCHI?
Nuestro evento de verano lleva celebrándose desde 2012 y puedo decir que es un evento tradicional y estupendo. Cualquiera que haya participado sabe que es un encuentro único. Yates, un restaurante, un parque, un hotel, una fiesta de gala... Es difícil encontrar un destino así, pero también es difícil hacer que todo funcione para que los invitados estén contentos, ya que la mayoría de ellos vuelven. Nunca se aburren, siempre hay algo nuevo, algo cambia, siempre hay algo que les sorprende.
¿EL PUERTO DEPORTIVO ESTÁ ABIERTO TAMBIÉN EN INVIERNO, ADEMÁS DEL VERANO?
Tenemos algunos amarres anuales, pero nos centramos en los diarios. Sin embargo, en invierno llenamos el puerto deportivo hasta el 1 de abril, ya que nuestro pequeño rincón es tranquilo y a algunos huéspedes les gusta quedarse allí, realmente lo disfrutan. En invierno es agradable estar en un paraíso así, sin aglomeraciones, sin estrés, en completa relajación.
¿CUÁNTO TIEMPO PIENSA SEGUIR TRABAJANDO?
Aún no he fijado una fecha para mi jubilación; todavía faltan algunos detalles, pero sin duda ese día llegará. Me alegro de poder transmitir mis (no diré conocimientos, sino mi experiencia) a las generaciones más jóvenes. También he conseguido transmitir algo a mi familia, porque mis hijos también trabajan en esta profesión: mi hija en el puerto deportivo y mi hijo en un yate. Cuando no trabajo, mis nietos me completan. Sólo cuando has sentido ese tipo de amor te das cuenta de lo rápido que pasa el tiempo.
¿QUÉ ES LO QUE ENCUENTRA MÁS IMPORTANTE EN SU TRABAJO?
Permítanme que vuelva al puerto deportivo. Es pequeño, pero hemos conseguido atraer a clientes que vuelven, todo gracias a un buen servicio y un trato personalizado. Esa es mi prioridad. Hemos recibido varios premios, como la Flor de Turismo al mejor puerto deportivo pequeño en 2018 y 2022, el Ancla de Oro concedida por la Guardia Costera en 2024, que es otra prueba de que somos apreciados por los profesionales del sector. Solo podemos progresar elevando la calidad, y lo hacemos a través de nuestros esfuerzos ecológicos, recogiendo y clasificando residuos, mediante campañas ecológicas, limpiando el fondo marino y las playas, introduciendo una estación de carga eléctrica para barcos, coches y bicicletas eléctricas. Mi máxima prioridad es mantener este nivel de servicio. Si lo hace, tendrá más éxito del que pueda imaginar.
Fotos Darko Šupuk, Martinis Marchi