Yates Benetti: Un icono de la náutica durante generaciones
Benetti es un fabricante de yates de lujo con una larga tradición que se remonta al siglo XIX. Los yates del astillero italiano son la elección de las personas más ricas y con más éxito del mundo, y suelen utilizarse para fiestas privadas, reuniones de negocios o simplemente para disfrutar de unas vacaciones
Yates Benetti: Siglo y medio de excelencia náutica
Benetti Yachts diseña, construye y vende embarcaciones en materiales compuestos de 34 a 44 metros y barcos en acero y aluminio de 37 a más de 100 metros en cinco categorías distintas: Class, Oasis, B.Yond, B.Now y Custom. Cada yate Benetti es una obra maestra única, desarrollada en torno a su propietario.
De los humildes comienzos a la prominencia mundial
El viaje de Benetti comenzó en 1873, cuando Lorenzo Benetti adquirió el Cantiere Darsena Lucca y sentó las bases del astillero Benetti. En más de 30 años, Lorenzo Benetti botó más de 30 embarcaciones en una época dominada por los magníficos veleros.
A lo largo de los años, Benetti ha sido capaz de crear verdaderas obras de arte, incluida una rara joya conservada junto a los dibujos de Leonardo da Vinci en el Museo de Ciencia y Tecnología de Milán: el "Brigantino San Giorgio", botado en 1921.
En la década de 1960, el astillero revolucionó el mundo de los yates al pasar de la construcción en madera a la construcción en acero. Nació el concepto de megayate moderno, y las series Delfino, Gabbiano y Mediterraneo se convirtieron en yates emblemáticos, evocando las legendarias historias de la aristocracia y la jet set internacional durante la era de"La dolce vita".
De los magnates de la música a la realeza de Hollywood: La fascinación de Benetti por las celebridades
Rainiero de Mónaco, David Bowie, Mick Jagger, Robin Williams, Michael Caine e incluso los Beatles, que a menudo eran invitados de su mánager, el propietario de un Delfino Benetti, todos compartían una conexión con estos yates.
A medida que la reputación de Benetti crecía, Adnan Khashoggi encargó el yate más famoso de todos los tiempos: el "Nabila", más tarde rebautizado por Donald Trump como "Trump Princess".
Su extraordinario diseño y sus opulentos interiores despertaron intriga y fascinación. El "Nabila" alcanzó tal estatus icónico que hizo su debut cinematográfico en una película de James Bond, "Nunca digas nunca", e inspiró la canción de Queen "Khashoggi's Boat".
En 1985, Paolo Vitelli, el joven propietario del astillero Azimut, adquirió F.lli Benetti, reconociendo y apreciando la excelencia del astillero de Livorno en la industria de yates de lujo. Bajo el nuevo nombre, Cantiere Benetti, Vitelli puso en marcha un plan de reestructuración financiera para devolver a la marca su antiguo esplendor.
Su visionario uso de materiales compuestos en la innovadora línea Classic 115 de 1988 se tradujo en la venta de cien unidades en apenas una década, un récord aún inigualado en el mundo náutico.
Una visión de futuro: Sostenibilidad y conciencia medioambiental
Con un enfoque pionero y anticipándose a lo que más tarde se convertiría en un componente del desarrollo industrial consciente, Paolo Vitelli construyó el primer yate diésel-eléctrico del mundo, el Ambrosia, en 2006. También creó un centro interno de I+D centrado en la sostenibilidad y la reducción del impacto ambiental.
Una de las obras maestras contemporáneas de Benetti es el"Luminosity", botado en 2020, un colosal yate Giga de 107 metros que incorpora un motor de propulsión híbrido. En 2022, el B.Yond de 37 metros fue galardonado como el yate más ecológico de su clase, gracias a su innovador sistema de propulsión híbrido.
Ese mismo año, el astillero revolucionó el concepto de estilo de vida a bordo con la serie Oasis Deck. Sus popas laterales, que se abren perfectamente al agua, crearon una nueva tendencia en el sector.
150 años de tradición náutica
Siglo y medio después de su creación, Benetti Yachts sigue simbolizando tradición, fiabilidad y excelencia. La "Casa del Yachting" sigue siendo un emblema de belleza atemporal y artesanía superior, destinada a dejar una marca indeleble para las generaciones venideras.
Fotos Benetti